Holanda, imponente

Holanda atropelló ayer 5-1 a una desconocida España, que mostró poco y nada de las virtudes que la llevaron a la conquista del Mundial hace cuatro años.

Holanda atropelló ayer 5-1 a una desconocida España, que mostró poco y nada de las virtudes que la llevaron a la conquista del Mundial hace cuatro años.Los dobletes de Robin van Persie y Arjen Robben más el tanto de Stefan de Vrij remontaron el gol inicial de Xabi Alonso, que transformó un dudoso penal cometido sobre Diego Costa.

“Hemos ganado 1-5. No es lo que esperaba. La forma en que marcamos los goles sí que la esperaba, pero no tantos”, declaró Louis Van Gaal, seleccionador de Holanda después del partido.

España inició con una derrota su andadura en Brasil, como ya hiciera en Sudáfrica frente a Suiza. Y, por la goleada recibida -la peor de su historia tras el 6-1 que encajó precisamente en el Mundial de Brasil 1950 contra el anfitrión-, deberá vencer obligatoriamente a Chile y Australia, que completan el Grupo B, si quiere pasar de ronda. “Estoy consciente de que es un momento muy delicado para nosotros, entre todos tenemos que intentar solucionar”, concedió el técnico español Vicente del Bosque.

Lenta, sin ideas y con una enorme fragilidad, España encajó cuatro goles en el segundo tiempo. Robben batió a Iker Casillas a los 53 y los 80 minutos tras ganar la espalda a los centrales Sergio Ramos y Gerard Piqué, que parecían incapaces de entenderse.

De Vrij batió de cabeza a Casillas, que fue estorbado previamente en el salto, a los 64. Y en el cúmulo de despropósitos que fue España, Casillas perdió el balón en un mal control, circunstancia que aprovechó Van Persie para volver a perforar la portería sin oposición a los 72.

“Ha sido complicado cuando ellos han estado adelante, no hemos tenido poder de reacción”, lamentó Andrés Iniesta. “A olvidarlo antes de enfrentar a Chile, hemos perdido el primero y tenemos que ganar los otros dos si queremos volver a ser campeones del mundo”.

España y Holanda, finalistas del último Mundial, brindaron un inicio de partido trabado, duro por momentos en el centro del campo, y muy táctico por parte de las dos selecciones, más preocupadas de no encajar gol que de hacerlo. Van Persie quiso matizar el resultado, recordando que, a pesar de su contundencia, se trata sólo del primer partido del Mundial. “No quiero que estemos demasiado emocionados por un partido, porque es un partido, son tres puntos”, señaló Van Persie, del Manchester United.

La poblada defensa holandesa de cinco hombres adelantados dificultó mucho la habitual circulación de balón de Xavi Hernández, Iniesta y David Silva. España intentó sorprender con algún balón al espacio para Diego Costa, constantemente abucheado por la afición brasileña, que no le perdona su decisión de renunciar a Brasil para jugar con España. Mediado el primer tiempo, España tomó el mando del partido. Xavi y Silva, expertos en el juego entre líneas, empezaron a encontrar con facilidad a Costa. En una primera ocasión, el artillero no acertó a disparar y en la segunda su zapatazo salió desviado.

A la tercera, dribló a De Vrij y dejó muerta la pierna con picardía para forzar el derribo del defensa holandés. El árbitro Nicola Rizzoli decretó penal y Alonso lo convirtió a los 27 minutos.

El gol espoleó a España y al borde del descanso, Iniesta habilitó a Silva que optó por picar la pelota en el mano a mano con Jasper Cillissen, quien logró repeler el balón. A la jugada siguiente, llegó el primer error de la frágil defensa española.

Con Piqué retrasado y rompiendo la línea de fuera de juego, Daley Blind cruzó un centro desde el medio campo sobre el desmarque de Van Persie, que batió la media salida de Casillas con un majestuoso cabezazo en plancha. Tras el descanso, España no fue ni la sombra de lo que un día le condujo a maravillar con sus victorias en la Eurocopa y el Mundial.

Brasil no perdona a Costa

Seguramente Diego Costa jamás pensó jugar un Mundial en su país con otra camiseta que no fuera la de Brasil. Pero eligió hacerlo con España por motivos que sólo él conoce y que nunca ha explicado. Y la afición brasileña hizo saber a Costa que no le perdona.

El recibimiento al artillero ayer se convirtió en un concierto de abucheos e insultos coreados a grito por los brasileños congregados en Salvador para seguir la paliza por 5-1 que Holanda le endosó a la campeona del mundo. Costa no pudo empezar de peor manera su andadura en una Copa del Mundo. El artillero fue titular tras recuperarse a tiempo de los problemas musculares que le apartaron de la final de la Liga de Campeones en mayo, cuando apenas llevaba nueve minutos sobre la cancha. Costa no marcó, pero participó del juego de España en la primera parte y forzó el penal que transformó Xabi Alonso para adelantar a la Roja.

Cristiano Ronaldo entrena con normalidad

Cristiano Ronaldo se entrenó ayer con normalidad, un día después de que encendió las alarmas al abreviar una práctica de la selección de Portugal y salir con la rodilla izquierda vendada y con hielo. Con una cinta adherida en esa rodilla, el ganador del último Balón de Oro se mostró participativo, al menos en los primeros 15 minutos de la práctica matutina que los periodistas pudieron presenciar. “Estoy seguro que llegará al ciento por ciento y que vamos a contar con él en el Mundial”, expresó el mediocampista portugués William Carvalho.

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