Iglesia las Mercedes

Con casi una cuadra entera de amplitud, localizada entre las calles José Reyes y Sánchez de la Zona Colonial, se erige  majestuosa la Iglesia Las Mercedes, lugar donde cientos de feligreses acuden cada 24 de septiembre para honrar a la Virgen del las M

Con casi una cuadra entera de amplitud, localizada entre las calles José Reyes y Sánchez de la Zona Colonial, se erige  majestuosa la Iglesia Las Mercedes, lugar donde cientos de feligreses acuden cada 24 de septiembre para honrar a la Virgen del las Mercedes, que ha sido designada como la patrona del pueblo dominicano.

Más de 400 años de historia esconden los muros de este templo religioso, una iglesia con encantos  para conquistar parejas que en muchas ocasiones la eligen para unir  sus vidas en el sagrado matrimonio, amparados bajo la imagen de la Virgen.

La Iglesia Las Mercedes fue el primer seminario de América, y también sirvió de monasterio, que a la vez servía de casa a religiosos. Allí se realizaba uno de los principales cultos de la época colonial. Hoy día el templo solo se limita a realizar misas cada domingo y las procesiones  el Día de Las Mercedes, que son celebradas cada 24 de septiembre.

Santiago Batista,  párroco de la entidad religiosa, cuenta que muchas parejas prefieren esta iglesia para contraer matrimonio por el   estilo y  la estructura de este templo, que guarda sus encantos coloniales, y porque ven en la Virgen de las Mercedes  “la madre espiritual que busca guiar esa unión”.

Esta  edificación consta de una nave abovedada y posee capillas laterales ubicadas entre sus contrafuertes. Tiene un coro alto, ábside octagonal y un altar mayor de estilo barroco.

Cuenta Batista que las piedras con que fue construida inicialmente esta iglesia,  muchas de las cuales aún se conservan, fueron trasladadas por  esclavos de la época colonial;  quienes recorrían alrededor de dos kilómetros  para llevarlas a su destino.

Sus columnas se preservan desde su construcción (1555 y 1557), las cuales suben varios metros hasta dar  límite con el techo, uno de sus atractivos más bellos, pues aunque no posee lienzos clásicos, como las reconocidas iglesias de Europa, su altura y estructura representan la época colonial.

El suelo y el prebisterio (lugar desde donde se inicia la procesión) está construido en mármol. Esta posee pocos vitrales,  por lo que la luz exterior no penetra al templo, lo que crea un ambiente de solemnidad. Para ver los vitrales hay que detenerse en algunas de sus capillas que se encuentran distribuidas alrededor de la estructura.

En el altar, ubicado al lado izquierdo de la Virgen, se encuentra la figura de Cristo Crucificado, que también data de la época colonial. La parte trasera del camarín  fue reconstruida manteniendo intacta la parte frontal y por tanto la visibilidad del público.

La iglesia está construida en piedras y ladrillos. Su estructura es un estilo gótico y plateresco, por la composición de algunos adornos que posee la Virgen de las Mercedes que están elaborados en plata. También el sagrario está completamente revestido de este material.

Datos

• El constructor de esta iglesia fue Rodrigo de Liendo, y cuentan que su terminación se produjo entre los años 1549 y 1616. Cuentan que el terreno en el cual fue construida  no tenía la capacidad de soporte necesaria, por lo que el edificio sufrió muchas resquebrajaduras al través de los siglos, las que se agravaron con invasiones como las de Francis Drake, quien la saqueó, y con los sismos de diversas épocas. A pesar de todos los inconvenientes que le han afectado, aún conserva la pomposidad con la que fue construida.

• El monumento sufrió reconstrucciones en 1635, en 1672 y en el 1673, período en el que se incrementó notablemente la construcción y en el cual se planificaron también obras de fortificación de la ciudad.

• Con la ocupación haitiana la iglesia es cerrada y se reabre con la Independencia, siendo donado en 1859 el edificio del convento a la Logia La Cuna de América. Desde el siglo XIX la Virgen de las Mercedes se establece como patrona de los dominicanos.

• En la iglesia vivió el dramaturgo, poeta y narrador español Tirso de Molina, hecho que le suma importancia a este templo religioso.

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