MINNEAPOLIS, Minnesota, EE.UU.— Los Tigres de Detroit no prometen nada a José Valverde. El derecho dominicano y que hace dos años lideró la Liga Americana con 49 salvamentos debe demostrar que aún puede lanzar lo suficientemente bien como para recuperar un lugar en el bullpen del club.
Pero los Tigres, que se quedaron sin un taponero fijo después de dejar que el tres veces seleccionado al juego de estrellas se convirtiera en agente libre, dieron un paso el jueves en tener a Valverde de regreso en las mayores al aceptar los términos de un contrato de ligas menores.
Después de enviar al venezolano Bruce Rondón, su mejor prospecto, a la sucursal de Triple A en Rochester casi al final de la pretemporada, los Tigres decidieron no tener un cerrador fijo. Phil Coke se llevó el salvamento en el primer juego de la temporada regular el lunes, pero desperdició una venta en la novena entrada de la derrota del miércoles ante los Mellizos.
«Desde mi perspectiva, uno nunca deja de seguir buscando», dijo el gerente general del equipo, Dave Dombrowski. «Uno hace todo lo posible por mejorar el club. No contamos con un cerrador dominante, y la mayoría de los equipos que tienen una oportunidad de ganar tienen un cerrador. Tampoco quiere decir que uno no puede ganar mientras se experimenta. Pero en este momento estamos en una situación en la que estamos experimentando. Y si la situación termina siendo mejor con Papá Grande (el apodo de Valverde), con Rondón, con quien sea… estamos dispuestos».
Valverde se reportará a la sede de pretemporada de Detroit en Lakeland, Florida, para lanzar contra algunos bateadores de ligas menores antes de ser asignado al equipo de Toledo de Triple A. Dombrowski dijo que no hay fecha ni garantía de que Valverde, de 35 años, se incorpore a los Tigres.
