En la campaña contra República Dominicana muchos de los enemigos enquistados en los organismos internacionales, lo primero que deben hacer es reconocer la realidad de un país que tiene no menos de 700 mil inmigrantes ilegales, sin ley ni orden.
Debían, como propone el director de Flacso, César Cuello, empezar por colaborar con recursos para ayudar al país a regularizar la situación.
“… Los países interesados, la comunidad internacional, deben también apoyarlo económica y técnicamente en el proceso de migración, que sea justo y digno para RD”, con respeto a los derechos humanos.
