Puede no ser fácil comprender un Dios soberano y tierno a la vez, misericordioso con el torcido y justiciero con el perverso; pero insondables son sus caminos, de modo que creer es crucial sobre entender y conocerle sobre seguirle. Hizo lo que vemos de lo que no se veía. Nuestro universo es la punta del iceberg de “su todo”. Ocasionalmente Dios trabaja en lo que existe para El, que es imperceptible al hombre, mientras el hombre avanza acelerado en su mundo palpable hacia ninguna parte, ignorando lo verdaderamente importante. Súbete en sus hombros y contempla: Dios usará lo que no es para hacer lo que no imaginas y llevarte donde decidió que es relevante. La obediencia es la luz del ciego en un mundo de genios sordos y videntes mudos.

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