Penetrar en el universo visual de Nelson Barrera, es sumirnos en un viaje al infinito en la búsqueda de lo humano, es, al mismo tiempo, un proceso de transformación constante, donde la descomposición del todo, permite la configuración de nuevas formas con un valor completamente distintas a la de la naturaleza para la que fueron creadas en principio.

La descomposición de la materia, guían al artista a la búsqueda de una nueva concepción del universo, otorgando valor a todo lo que se cree que lo ha perdido. Precisamente, hace poco, asistimos a la presentación de una selección de trabajos de este genio creador en la sala de exhibiciones transitorias del Museo de las Casas Reales, bajo el título “Resurrección de la materia”, curada por el especialista Abil Peralta Agüero, que, a mi modo de ver, no deja de ser más que una reafirmación de la vida. Así, porque las máquinas que presente no pueden construirse sin que intervenga el ingenio humano y, que pueda suscitarse una nueva invención, es producto de un alto compromiso social que, en este caso tiene también un fin medioambiental.

Más claramente, Nelson Barrera se apropia de materiales reciclables, fundamentalmente de hierro viejo para de esa forma crear una serie de estructuras a las que ofrece nuevas funciones en tanto objeto arte. La representación humana se mantiene en tanto figura robótica, abriendo paso a una suerte de animales como su “Centinela de la media noche” o su “auto-saurio”, los cuales acentúan la parte sensible en el proceso creativo de este gran maestro del ensamblaje.

A Nelson todo le sirve, cualquier objeto encuentra un fin en su obra y, lo que en principio parecería simple, da lugar a configuraciones complejas. Asimismo, nos encontramos con una serie de piezas que bien pudieran tener su igual en el mundo real con un fin enteramente utilitario como su “Lavador de pecado”, pero que, por su estructura formativa y proceso conceptual, más que simples objetos, terminan convertidos en obras de arte, por la visión estética con la que fueron creados y su alto nivel de artisticidad

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