Aunque llovió y llovió, no fue como queríamos. Pero la tormenta Bertha dejó agua suficiente para provocar que los sistemas de la CAASD, que se nutren en la cuenca del río Haina, empezaran a bombear a plena capacidad. Y eso llena de alegría a mucha gente que estaba padeciendo en todo lo que es Santo Domingo Oeste y varios barrios del Distrito Nacional. También mejoró el sistema de Jigüey y Aguacate, y probablemente otros campos de agua subterráneos y superficiales vitales para el suministro de otras ciudades. Es agua lo que queremos. La sequía nos hizo entender la importancia del líquido. ¿Lo cuidaremos más?
Y llovió y llovió
Aunque llovió y llovió, no fue como queríamos. Pero la tormenta Bertha dejó agua suficiente para provocar que los sistemas de la CAASD, que se nutren en la cuenca del río Haina, empezaran a bombear a plena capacidad. Y eso llena de alegría a…