República Dominicana tiene grandes debilidades en el manejo de la cadena de frío de sus productos agrícolas para exportación; tanto, que de más de 100 empacadoras existentes apenas entre seis y siete poseen frigoríficos.
Por ejemplo, todavía en el país ningún invernadero transporta su producción en camiones refrigerados, sino en caliente.
Es una situación que merma la calidad de los vegetales y por tanto, hace que éstos pierdan su capacidad de anaquel. En el mercado internacional los precios de los vegetales dominicanos están deprimidos, precisamente por las deficiencias en el aspecto de refrigeración, de acuerdo a informaciones suministradas por empresarios de esa actividad.
“En la mayoría de los casos los vegetales obtenidos de invernaderos pasan en caliente entre 30 y 36 horas, desde el momento en que se cosechan, hasta que se introducen en los contenedores para embarcar. A nadie le gusta que eso se diga”, sostiene el presidente del Clúster de Invernaderos, José Miguel de Peña.
La opinión del citado productor es similar a la que tiene Rafael Leger, titular del Clúster de Mango, quien asegura que muchas de las dificultades con que se encuentran en el exterior los rubros agrícolas dominicanos son el resultado del mal manejo poscosecha de éstos. “Estamos haciendo pininos, empezando a abrir camino, porque no existe una academia en el país que indique lo que hay que hacer en ese sentido”, apunta Leger.
Su principal queja es que “la mayoría de las universidades dominicanas educan para producir, pero no enseñan qué hacer de la empalizada para adelante”. Los miembros del Clúster de Mango han recibido orientaciones de un experto de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo (Usaid) sobre el proceso del corte del mango, el grado de madurez que debe tener éste al cosecharlo, cómo preseleccionarlo antes del corte en los campos y cómo hacer el “desleche” para no quemar la fruta. Asimismo, sobre cómo trasladar los mangos a la planta de empaque. Lo ideal sería, según aconsejan conocedores del tema, que en el caso de algunos rubros los aparatos enfriadores estén en el mismo perímetro de las fincas, de suerte que, una vez éstos son lavados, puedan iniciar el proceso de refrigeración.
Los procesos de enfriamiento varían en algunos productos. Por ejemplo, en el aguacate el “choque de frío” para bajar la temperatura se hace previo al proceso de limpieza y selección. El presidente de la Asociación Dominicana de Productores de Banano (Adobanano), Salvador Estévez, asegura que a nivel de los bananeros “las cosas andan bien”. Sostiene que en la cadena de frío, en el caso del banano, hay dos opciones. La primera consiste en programar la cosecha y tener un contenedor en la finca para refrigerar la producción según va saliendo, previo proceso de lavado con agua potable y el desleche (extracción de las manchas).
De ahí el producto se envía en cajas sobre paletas a puerto. Una paleta es una plataforma de madera sobre la cual se colocan 48 cajas de banano. El otro modelo consiste en introducir los bananos a un contenedor seco (no refrigerado) y de ahí ese contenedor va al puerto donde sí hay refrigeración. Un banano luego de cortado no debe pasar más de 12 horas sin refrigerar.
Temperatura adecuada
Rafael Leger explica que -en el caso del mango para comercialización en el exterior- se requiere colocarlo en cajas con adecuada ventilación, que no sea afectada por las paletas, y llevar la temperatura en el cuarto frío a 10 grados Celsius.
De ahí debe pasar al contenedor para transportación. “Es el mismo grado que debe tener la pulpa hasta llegar a su destino”, explica el titular del Clúster de Mango.
Sostiene que todo el que exporta algún producto agrícola debe conocer bien sobre la temperatura y el grado de madurez ideal que se requiere para realizar bien esa actividad y no quedar mal con los compradores. Eso se consigue entrenándose con personas que conozcan del tema.
Datos sobre el embarque
RD exporta muchos bananos a Europa, un trayecto en el que un barco puede tomar entre 10 y 12 días de tránsito. Normalmente los barcos tienen una cámara refrigerada donde se mantiene la fruta hasta el puerto de destino. El banano se embarca verde igual que otras frutas.
Cuando el banano llega al puerto de destino va a una cámara de maduración por tres días, donde se expone a un proceso para maduración de manera homogénea.
Una cámara de maduración puede tener capacidad para 50 paletas (2,400 cajas de banano).
