El septuagésimo sexto período de sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas (AGNU 76) que comenzó el 14 de septiembre, y el debate general de alto nivel se ha llevado a cabo desde 21 hasta 27 de septiembre con el tema “Crear resiliencia a través de la esperanza: para recuperarse de la COVID-19, reconstruir de forma sostenible, responder a las necesidades del planeta, respetar los derechos de las personas y revitalizar las Naciones Unidas”.
No hay mejor plataforma para medir la temperatura de la política internacional, hacer un recorrido por los asuntos más apremiantes de la agenda internacional, las rivalidades regionales más acentuadas, así como de los compromisos mundiales más respaldados. La pandemia de la covid-19, la crisis climática y el triunfo de los talibanes en Afganistán estarán entre los principales asuntos que centrarán la atención de los líderes internacionales en la Asamblea General de la ONU.

La reunión se lleva a cabo en medio de nuevas tensiones, incluida una ruptura diplomática entre Estados Unidos y su aliado Francia por un acuerdo de submarinos nucleares. Australia, como parte del acuerdo “Aukus” con Estados Unidos y Reino Unido, dijo que cancelaría un contrato multimillonario para comprar submarinos de Francia, por lo que, Francia llamó a consulta (retirada) a sus embajadores en Washington y Canberra.

Sin embargo, más allá de los temas económicos o de salud, serán las cuestiones relacionadas con los esfuerzos de vacunación los que ocuparán un lugar central en la narrativa presentada por los miembros. Al respecto, podemos esperar discursos en favor de la liberalización de la propiedad intelectual de las vacunas a fin de que su producción sea posible en otros países que no han podido acceder fácilmente a los canales de distribución existentes.
Adicionalmente, no faltarán los discursos en contra del acaparamiento de las vacunas a manos de algunos países ricos, mientras que en otros lugares no ha sido posible ni siquiera una primera aplicación.

Los temas relacionados con el cambio climático estarán a la orden del día, especialmente a la luz de la publicación del último informe del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático. Las advertencias que emanan de dicho documento estarán propiamente reflejadas en los llamados a la acción de algunos países que han sido pioneros en la causa, al mismo tiempo que otros justifican sus omisiones frente al Acuerdo de París sobre cambio climático o la necesidad de acelerar el crecimiento de sus economías a base de energías fósiles. Es de vital importancia incluir las voces y el liderazgo internacional en todos los esfuerzos para restablecer el equilibrio con la naturaleza, abordar la emergencia climática y avanzar frente a la crisis de contaminación, asegurándonos de no dejar a nadie atrás.

Los hechos en Afganistán y sus implicaciones para la estabilidad regional serán tema central para múltiples países. Los acontecimientos que tomaron lugar en ese país han puesto la atención del mundo entero en el futuro que la nación afgana experimentará una vez que el grupo talibán se consolide en el poder. Esperemos discursos llamando a la protección de los derechos humanos de mujeres, niñas y minorías, y en la necesidad de que no vuelva a ser un espacio para la exportación del terrorismo.

Un tema que podemos esperar, sobre todo de países latinoamericanos, y en especial para la República Dominicana, es el relativo a la migración, tema que se intensifica por la situación de la nueva crisis migratoria que enfrenta Estados Unidos.
Asimismo, los Estados miembros en general destacarán los avances o los retos más relevantes en la implementación del Pacto Mundial para una Migración Segura, Ordenada y Regular adoptado mediante resolución A/RES/73/195.

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